La historia de Certina se remonta al año 1888 en Grenchen, los hermanos Kurth abrieron su primera fábrica de mecanismos y otros elementos para la industria relojera, esta fabrica empezó con tan solo 3 trabajadores. Por el momento todavía no fabricaban relojes.
Los inicios de “Grana”
Por primera vez los hermanos kurth le pusieron nombre a la marca y fue “Grana”, una forma abreviada de “Granacus” el nombre en latín de Grenchen. Em 1906 parecen los primeros relojes de pulsera y la mayoría fueron para mujeres , ¿ sabes por que ? por que los hombres se negaban a usar relojes de pulsera, solamente de bolsillo.
En 1918 por fin transforman completamente la fábrica y se convierte en una manufactura capaz de crear todas y cada una de las piezas de sus relojes. Pero es en 1936 cuando empiezan a innovar y a crear relojes que a día de hoy todavía usamos como los relojes digitales. Estos usaban un mecanismo algo anticuado para nuestra época, funcionaban con un resorte estándar.
En apenas 49 años desde que habían creado una de las mayores fabricas de relojes con 500 trabajadores y una producción diaria de 1000 relojes.
Certina en el presente
Desde entonces Certina no ha parado de crecer de una forma increíble, es difícil no relacionar Certina con el deporte ya que grandes deportistas españoles e internacionales han sido patrocinados por esta marca, como por ejemplo Sete Gibernau. También podemos destacar que en 1960 Certina consiguió llevar al Himalaya un equipo de personas suizo, equipado exclusivamente con relojes Certina DS para demostrar que soportaban todos los cambios de presión y altitud, evidentemente los relojes aguantaron a la perfección los 8.222 metros del Himalaya.
En definitiva, Certina es una apuesta segura cuando buscamos algo de calidad, belleza y deportividad, eso nos dice su historia y también su presente con relojes que no dejan indiferente a nadie.